¿La vitamina B17 como nuevo tratamiento contra el cáncer?
La vitamina B17, conocida también como Amigdalina o Laetril, aparece en muchos anuncios como la cura absoluta para el cáncer. Se habla mucho de una conspiración de compañías farmacéuticas para no poner a disponibilidad del público una “medicina tan accesible” como esta, ya que les originaría grandes pérdidas económicas. Pero, ¿realmente existen estudios que respalden el uso del Laetril como tratamiento para el cáncer?
Antes de responder a esa pregunta, es importante responder esta otra: ¿qué es la Amigdalina/Laetril?
La vitamina B17 (amigdalina) es un compuesto químico encontrado en las semillas de muchas frutas, en nueces y en numerosas plantas (habas, trébol y sorgo). La denominación “Laetril” deriva de los términos levorotatorio y mandelonitrilo, y es usado para describir a una forma purificada del compuesto Amigdalina (un compuesto vegetal que contiene azúcar y produce cianuro de hidrógeno). Se piensa que el cianuro de hidrógeno es el principal agente anti-cancerígeno que se forma a partir del Laetril, aunque existen otros 2 compuestos a los que se le podría atribuir esta propiedad. Este compuesto está disponible para ser administrado de forma oral, como en inyecciones (intravenosas o intramusculares).
Ahora, siguiendo con la interrogante inicial, en el sitio web de PubMed se encuentra un resumen de la información disponible acerca del Laetril en el tratamiento del cáncer, la cual se actualiza regularmente por el consejo editorial de Terapias integrativas, alternativas y complementarias del PDQ (del inglés, Physician Data Query). Según su última versión (Marzo, 2017), los puntos concluyentes son los siguientes:
El Laetril ha mostrado tener baja actividad anticancerígena en estudios animales (estudios se realizaron en roedores, perros, conejos y gatos) y ninguna en ensayos clínicos en humanos (sólo existe información de 2 ensayos clínicos en humanos, pero no existe un estudio clínico controlado, es decir, que incluya una comparación entre un grupo que recibe solo Laetril, un grupo placebo y otro grupo que recibe un tratamiento distinto).
Los efectos secundarios causados por el uso de Laetril se asemejan a aquellos causados por envenenamiento con cianuro, incluyendo daño hepático, dificultad para caminar (causada por daño a los nervios), fiebre, y situaciones más extremas como coma y muerte. La formulación oral genera más de estos síntomas que la formulación en inyecciones (debido a que las bacterias intestinales promueven la liberación de cianuro) y también pueden verse incrementados cuando se ingiere almendras, semillas trituradas de frutas o con la ingesta de frutas o vegetales que contienen beta-glucosidasa (apio, duraznos, brotes de soya, zanahorias), enzima causante de la liberación de cianuro a partir de amigdalina.
El uso del Laetril NO está aprobado en los Estados Unidos.
La publicidad no apropiada de este compuesto como tratamiento para el cáncer es penalizada por la FDA (Food and Drug Administration) en EE.UU.
Finalmente, es importante mencionar que para que un estudio califique como evidencia tiene que seguir una serie de requerimientos minuciosos y pasar por revisión científica. Hasta el momento, la evidencia no es suficiente para apoyar el uso del Laetril como tratamiento anti-cancerígeno.
Consejo de NoisyScience: Recomendar el uso de este compuesto, en vez de una terapia convencional contra el cáncer, podría estar quitándole a una persona la oportunidad de alcanzar la cura de la enfermedad.
Referencias:
Este texto fue adaptado de la información contenida en el link (revisarlo para mayor información): https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmedhealth/PMH0032851/
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